Sociedad de la información.
Una sociedad de la información es aquella en la cual las tecnologías que facilitan la creación, distribución y manipulación de la información juegan un papel esencial en las actividades sociales, culturales y económicas. La noción de sociedad de la información ha sido inspirada por los programas de desarrollo de los países industrializados.
CARACTERISTICAS :
- Exuberancia
- Omnipresencia
- Irradiación
- Velocidad
- Multilateralidad / Centralidad
- Interactividad / Unilateralidad
- Desigualdad
- Heterogeneidad
- Desorientación
- Ciudadania pasiva
VIDEOJUEGOS, UNA ADICCIÓN PARA TODOS
Para
comenzar a hablar de los videojuegos debemos recordar que a pesar de ser un
gran entretenimiento para los niños, jóvenes y adultos también son un medio de aprendizaje
ya que nos desafían para saber hasta donde somos capaces de llegar con las
habilidades que Dios nos ha regalado, cada vez que logramos nuestros objetivos
nos recompensan con medallas o estímulos que nos animan a seguir adelante, de
igual manera nos permiten enfrentarnos sin tener que pagar las terribles
consecuencias que pueden traer las decisiones que tomamos por la adrenalina o
el entusiasmo que nos da el estar jugando algún videojuego, también nos sumerge
en un mundo lleno de reglas y condiciones que por más que no queramos las
tenemos que cumplir y aprender, a pesar de todas estas características los
videojuegos ayudan a desarrollar el coeficiente de los niños y toda persona que
haga parte de ellos y al pasar de los años ellos han pasado de ser un acto
lúdico a convertirse en una violencia desenfrenada.
Una
de las consecuencias que este gran problema ocasiona es el bajo rendimiento
escolar, los niños crean un mundo artificial en donde se sumergen por completo
y pierden la noción del tiempo y de lo que pasa a su alrededor, dejando todo lo
demás a un lado, pues nada es más importante que eso desarrollando una lejanía con
sus responsabilidades escolares, la familia, amigos, y demás personas, cada vez
que esto sucede las padres de estos niños caen en una profunda desesperación y
depresión al saber que sus hijos están tan encadenados a esto que llegan a
querer más a los propios avatares que a sus seres queridos, esto es, quizás,
debido a que en esos juegos ellos encuentran diversión, distracción y un lugar
donde se pueden refugiar o distanciar de sus problemas. Si tan solo en su hogar
estuvieran más atentos esa situación podría evitarse, además de los daños colatares
como trastornos mentales, ya que estos juegos muchas veces hacen que el
comportamiento de estos individuos sea igual que lo que ven dentro de ellos,
transmitiendo mensajes equivocados, creando conflictos en muchas familias y si
esto no se detiene con el pasar de los años, los niños, al crecer, se
convertirán en hombres violentos, maltrataran a sus mujeres y esa violencia
desatara una cadena, que puede continuar por generaciones.
Los
videojuegos por no llamarlos “cosa maligna”, son algo más que una adicción puesto que ellos vendrían a llenar un vacío que
a lo largo de su niñez o en los tantos años que tenga la persona ninguna de las
actividades que haya hecho lograron llenar ese
abismos que tiene y creo que eso podría abarcar otros temas de adicción (pero eso ya eso es
otros casos). El asunto es que los juegos pueden presentar muchos mecanismos
para mantenernos jugando, además de los que refieren al desarrollo de
habilidades ligadas al aprendizaje. Ahora bien, lo que a mí me interesa es
ahondar en si esta característica potencialmente adictiva es algo “intrínseco”
(por decirlo de algún modo) de los videojuegos.
Los
niños y adolescentes que jugaban más, tenía una competencia social más baja y
una mayor impulsividad estaban en mayor riesgo de convertirse en jugadores
patológicos.
Los
autores del estudio sugieren que además de ser una estrategia de supervivencia
para los niños que ya están deprimidos o ansiosos, el juego llega a aumentar
algunos problemas como la impulsividad, que puede ser más pronunciada una vez
que los niños o jóvenes entran en un juego patológico, y esta conducta puede
durar mucho tiempo como cualquier otra conducta adictiva.
Según
el estudio, los niños y jóvenes que dejaron de ser jugadores patológicos
terminaron con niveles más bajos de estos síntomas dañinos provocados por su
afición, pero los niveles se mantuvieron aún más altos que el de niños que
nunca se volvieron jugadores patológicos.
La
solución que muchos de los especialistas traen para esta problemática es la de
que los padres entren en una profunda relación
con sus hijos para que así cada problema que ellos tengan o dificultad
tengan el valor y la confianza para sentir el apoyo de sus padres, es decir que
los padres tengan tiempo suficiente para sus hijos y lograr llenar completamente
el vacío que pudieron haber tenido a lo
largo de sus vidas.